Tratamiento eficaz para reafirmar la piel
Estiramiento cutáneo con láser. Todos envejecemos, pero ninguno de nosotros desea ver los signos de la edad. Hasta ahora, la cirugía plástica mayor era el único tratamiento eficaz para la laxitud cutánea, que añade años a nuestro aspecto facial general. Sin embargo, aunque queremos mantener un aspecto firme y fresco, los ajetreados estilos de vida actuales dejan poco tiempo para los periodos de recuperación postoperatoria, por no hablar de los efectos secundarios o los costes prohibitivos de la cirugía. Además, ¿quién quiere esperar a que la flacidez sea tan grave que exija una intervención quirúrgica de envergadura? Hoy existe una alternativa sencilla, rápida y no invasiva: El estiramiento cutáneo 780 nm. De forma segura e indolora, esta tecnología tensa la piel flácida de la cara, el cuello, los brazos y el abdomen, donde la piel flácida señala de forma poco atractiva el paso del tiempo.
Este tratamiento calienta eficazmente la capa interna de la dermis (sin dañar la epidermis superficial de la piel), induciendo la formación de colágeno, esencial para un aspecto firme y joven.
Los pacientes deben consultar al Dr. Macri para determinar su tratamiento. Normalmente se requieren seis tratamientos para obtener resultados óptimos. Los resultados dependen de factores como la edad, la localización de la zona tratada y la gravedad de la laxitud cutánea. Por lo general, los pacientes notan una mejoría poco después del tratamiento, mientras que otros observan los resultados gradualmente. El estiramiento cutáneo garantiza un tratamiento seguro y eficaz. Los pulsos de luz calientan con precisión la zona deseada, sin causar daños ni molestias en la piel. Los pacientes apenas sienten dolor con el tratamiento de luz pulsada y pueden reanudar sus actividades normales inmediatamente. De hecho, puede considerarse un «procedimiento a la hora de comer». Muchos profesionales muy ocupados acuden para someterse a este procedimiento durante la hora del almuerzo. Los ensayos clínicos realizados por las principales autoridades en luz pulsada documentan su seguridad y eficacia. Aunque la tolerancia al dolor es una cuestión individual, la mayoría de las personas toleran bien el tratamiento de estiramiento cutáneo y describen una sensación de calor.
Los métodos convencionales de estiramiento cutáneo incluyen lociones y cremas tópicas, dermoabrasión, peelings químicos y láseres de rejuvenecimiento. Dado que las emulsiones superficiales no pueden restaurar completamente el colágeno de la capa interna de la piel, pueden tener un valor limitado si no se utilizan en combinación con otros tratamientos. El rejuvenecimiento ablativo, aunque más eficaz, puede causar inflamación y enrojecimiento. En cualquier caso, el prolongado tiempo de recuperación que suele acompañar a los rejuvenecimientos más drásticos puede no ser adecuado para los pacientes que buscan un rejuvenecimiento cutáneo eficaz con un tiempo de inactividad y un riesgo mínimos. En cambio, la luz pulsada penetra y cura la capa interna de la piel sin dañar su superficie. La luz tensa, tonifica y da textura a la piel. El resultado: mejora del aspecto general de la piel sin dañarla. A veces, durante los primeros tratamientos, los pacientes sienten una «sensación de tirón», que es la tirantez de la piel y el tejido subcutáneo. Durante los tres a seis meses siguientes, los fibroblastos estimulan el colágeno y la elastina para producir nuevo colágeno. La terapia de mantenimiento consiste en un tratamiento cada seis meses para mantener su «piel tensa».